Aunque la mayoría de los socialistas de Madrid hemos dejado atrás el período de Primarias y estamos en lo importante que es ganar las elecciones el 22 de mayo en Ayuntamientos y en la Comunidad de Madrid, lo cierto es que nos han quedado algunos versos sueltos que no superan la derrota y hacen gala de un trinitarismo del que ya no es partidaria ni la propia Trinidad Jiménez. En palabras de un buen amigo «papistas en un país de ateos».
Hago esta reflexión ante el estupor que me provoca ver cómo la semana pasada era una afrenta a la renovación, una rémora para Tomás Gómez incluir como número 3 de su lista al compañero Juan Barranco y esta semana es un gran valor añadido que Jaime Lissavetzky lleve como número 2 a Ruth Porta.
Las mismas personas que pusieron el grito en el cielo porque Barranco ya había sido concejal y alcalde de Madrid, Diputado, Senador… hoy están eufóricos y se olvidan que Ruth Porta tiene una trayectoria similar, concejala del Ayuntamiento de Madrid, Diputada, Senadora…
Yo felicité a nuestro Secretario General y candidato Tomás Gómez cuando anunció quiénes le acompañarían en los primeros puestos de la lista porque me parecieron compañeros y compañeras de peso y valía, que traerían votos y trabajarían lealmente con él y hoy digo que Jaime Lissavetzky tiene el mismo derecho a rodearse de compañeros que le aporten lo que crea conveniente me gusten más o menos en lo personal o por su trayectoria.
De lo que aquí me quejo es de la doble vara de medir según sean míos o tuyos, de estos compañeros trinitarios que se olvidan de que la propia Trini ha dicho que ella está en otros menesteres en el Ministerio de Asuntos Exteriores y que no quiere saber nada de viejas rencillas.
Por suerte, son una pequeña y ruidosa minoría, que como he dicho antes, la mayoría del partido hemos pasado página y estamos a lo vital, a lo definitivo, a ganar las elecciones en mayo y que esa victoria del socialismo en Madrid, ayude a repetir victoria en España en marzo de 2012.
Igual de incongruente me parece criticar al PP por hacer una cosa y hacer nosotros otra idéntica, es decir, si yo me río cada día del PP de Madrid por coger al señorito David Pérez, niño bien de la Sierra Rica de Madrid y mandarlo a luchar por Alcorcón, donde no creo que haya pisado en toda su vida, luego no puedo felicitarme si nosotros hacemos lo mismo. Si usamos los compañeros como cromos intercambiables, porque yo creo que el municipalismo es otra cosa. El municipalismo implica proximidad, cercanía, conocimiento de lo de uno…
En fin que sigo ojiplática y lo que te rondaré, morena.
PD ayer hablaba del mal del Twitter, que os ha gustado mucho, y hoy tenemos un nuevo ejemplo, #turismobisbal… calladitos estáis más guapos.
Estás que lo tiras… Muy buen post.
Yo creo que el problema reside en que aún a día de hoy se habla de ‘tomasismo’ y ‘trinitarismo’ dentro del partido, cuando realmente tendría que hablarse de candidatos a la Comunidad y al Ayuntamiento. Esto no es más que un ‘alimento al troll’, para que un día sí y otro también se entre en discusiones banales que acaban enfrentando a compañeros.
Respecto a los paracaidistas, pues eso, las pajas y las vigas.
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