En esta España nuestra que todo lo critica y que siempre piensa que cualquier tiempo pasado fue mejor, echo la vista atrás para recordar que yo quería estudiar medicina y medito sobre por qué no lo hice.
Como ya tengo una edad, yo estudié la EGB, donde era una alumna modélica de todo sobresalientes y notables y luego pasé al Instituto para hacer BUP y COU y como me gusta tanto decir, ahí empezó Jesucristo a padecer.
En la primera evaluación ya en 1º de BUP suspendí matemáticas, inglés, dibujo técnico y ciencias naturales. Es verdad que el salto del cole a un instituto como el Ramiro de Maeztu es una caía libre.
También es verdad que fue el año de las huelgas estudiantiles con aquel cojo mantecas rompiendo mobiliario urbano y los caballos persiguiéndonos por la Gran Vía. Es verdad también que al final de curso lo aprobé todo en junio pero me di cuenta de una verdad inmutable: soy negada para las matemáticas.
En 2º de BUP ya vi que mi problema con las mates era genético y eso que tuve un ángel del cielo de profesora que me tomó como su buena obra del año y me hizo menos insoportable mi transitar por el curso. Pero además comprendí que el problema se extendía a la física y química que suspendí todo el año. El dilema era que había que elegir ciencias, letras o mixtas y que eso condicionaba indefectiblemente mis futuros estudios universitarios.
Medité un rato, yo soy de toma de decisiones rápidas y me di cuenta de que no iba a poder superar un bachillerato de ciencias para intentar estudiar medicina, elegí mixtas y decidí que sería abogada, más cómodo, más al alcance de mis posibilidades y compatible con mi carácter.
Con la perspectiva y la indulgencia que dan los años creo que se perdió un gran médico conmigo ya que tenía vocación, empatía y una memoria prodigiosa, pero el sistema educativo era severo, tajante y absolutamente injusto.
Ahora, con la denostada ESO, mi hija está en una situación parecida. Este año termina 4º de la ESO y tiene que elegir qué bachillerato hacer. También quiere ser médico y también tiene algunas dificultades con las mates y la física y química aunque muchas menos que yo a su edad.
Pero mi hija tiene una ventaja, en el actual Bachillerato hay más itinerarios de estudio y están mejor enfocados en función de lo que quiere hacer en el futuro. Es decir, podrá elegir un biosanitario, tendrá más biología, sufrirá las mates, pero no tanto la física y química por lo que la he animado a luchar por su sueño.
Para rectificar siempre hay tiempo y por lo menos no echará la vista atrás cuando llegue a la cuarentena y pensará… yo quería ser médico.
¡Andá, yo también! Pero a mí me lo impidió el azar: en Selectividad cayeron Matemáticas y Química. ¡Me llegan a caer Biología y Física! Así que saqué un 6,7 y no me dio para medicina. Así que hice Farmacia (porque era parecida) y he acabado de bibliotecario 2.0. Las vueltas que da el mundo…
(Añado que casi mejor, porque yo, es ver sangre y caigo redondo)
Yo también soy de aquella generación marcada por un sistema rígido, castrador de sueños y vocaciones. Mi talento en ciencias también resultó justo y una falta de orientación en el centro en el que estudié me acabaron llevando por un itinerario poco adecuado a mis intereses. Espero que mi hija (que aún tiene nueve años) lo lleve mejor y pueda elegir mejor. A pesar de todo no me quejo y creo que conseguí sumar conocimientos y experiencias completamente ignorados para mi en mi juventud y aunque en estos momentos no trabaje (espero que por poco tiempo) he tenido experiencias profesionales estupendas.
Un beso.
cia nada mejor que derecho, aunque creo que también hubieras sido una gran periodista Pro hija si a tí te ha llamado la vida por el camino de la elocuencia nada mejor que derecho, aunque creo que también hubieras sido una gran periodista, tus crónicas de cualquier tema hubieran sido memorables, por eso esto de los blogs y el 2.0 te va tan bien.
Ale que la medicina te hubiera dado muchas penas y como estás eres estupenda. Besos mi Mertueil.
No se que ha pasado que se ha dado la vuelta el comentario empieza en Pero hija si a tí sobra todo lo anterior,