Navalcarnero, ciudad sin Ley

Hace 16 años que Baltasar Santos llegó al poder y ha hecho del pueblo su coto de caza privado, donde los vecinos no somos gente, somos sus «criados». Sorprendentemente, el 22 de mayo, volvieron a salir por mayoría, no tan aplastante como la legislatura anterior (te aseguro que nos estamos encargando de que todos los vecinos sepan toda la verdad) pero sigue estando ahí, y cuando acabe su legislatura habrá gobernado durante la friolera de 20 años! Y de esta manera…

Así comienza el escalofriante relato que me ha hecho llegar una vecina del municipio, de lo que sucede en Navalcarnero por los desmanes de un gobierno municipal del Partido Popular que ha decidido hacer del pueblo su cortijo particular, con un alcalde ejerciendo de cacique y con una ciudadanía que sufre esta situación tremenda.

-Respeto en cursiva el texto como lo he recibido-

De lo mucho que me cuenta esta vecina, me deja sin palabras que el Alcalde sometiera a votación la celebración del Pleno del Ayuntamiento. Si, como lo leéis, votó y con su mayoría ganó NO CELEBRAR EL PLENO. Yo jamás he visto nada igual:

Te hago un resumen del penúltimo pleno celebrado en el ayuntamiento, que presencie para mi posterior cabreo y bochorno ajeno, ya que terminó por no celebrarse. El alcalde sometió a votación el pleno!!!!! Sí, sí, como lo lees!!!! Cuando estaba convocado y firmada el acta por él mismo. Lo que no se esperaba fue la masiva afluencia de público. Vecinos preocupados por esta situación. Gente que empieza a darse cuenta de la calaña de este personaje que tenemos por alcalde.

La Razón por la que el Señor Santos no quiso que se celebrara el Pleno con gran cantidad de vecinos presentes es la importancia de los temas que allí se iban a tratar y que con el rodillo de la mayoría del Partido Popular quedarían a su antojo.

Varios puntos del orden del día estaban relacionados, por ejemplo, con el corte de luz de las dependencias del ayuntamiento por no pagar la luz (lo solucionó poniendo transformadores eléctricos y de gasoil), la corrupción en la que está inmerso desde hace años con el tema de recalificación de terrenos de lo que antes era «El Pinar» y ahora es un complejo urbanístico llamado «La Dehesa», explicación del porqué de la ruina del ayuntamiento si somos el tercer municipio de la Comunidad de Madrid que más alto tiene el IBI, explicación de dónde va nuestro dinero, etc… Después de la votación el pleno quedó desestimado por mayoría, y tanto él como sus concejales se marcharon. Allí nos quedamos todos los demás despotricando de él, y tanto los concejales de la oposición como todos nosotros estuvimos largo y tendido debatiendo qué hacer ante tal situación.

El relato de la vecina de Navalcarnero sigue desgranando las barbaridades que suceden en este municipio, que como no es Parla y allí no fue alcalde Tomás Gómez no aparece en Telemadrid, ni se nombra cada semana en el Pleno de la Asamblea.

Hace cosa de un mes, sufrimos una huelga de limpieza de basuras y calles, fomentado por el impago del ayuntamiento a la empresa FCC.

El tema de las cuevas, otra cosa igual. Se embarcó en ese proyecto en solitario. Se puso a picar sin permiso de obra, sin estudio geotécnico, poniendo en peligro la estabilidad de las viviendas de muchos vecinos (el suelo de uno de ellos se vino abajo. También está denunciado por ello).

Termina su carta con la siguiente despedida que es un grito de socorro, una llamada de atención ante lo que ya no es tolerable:

Espero que te hagas una idea de la complicada situación que aquí vivimos, y cualquier apoyo que podamos recibir será bien recibido.

Acabo de enterarme de que Tomás Gómez visita mañana sábado el municipio de Navalcarnero para enterarse de primera mano de todos estos problemas de sus vecinos y demostrarles que los socialistas de Madrid estamos con ellos, preocupados por la corrupción y el caciquismo que rodea al Alcalde del Partido Popular de Navalcarnero.

Esperamos que este sea el comienzo del fin de este personaje y que los vecinos puedan disfrutar de su ciudad sin tener que sufrir el abuso de las instituciones que están o deberían de estar a su servicio.