Alcaldesa «con suerte»

Hoy ha sido cesado, aunque él nos lo ha vendido como una dimisión, el Vice alcalde del Ayuntamiento de Madrid y número 2 de Ana Botella, Miguel Angel Villanueva, por el escándalo de ilegalidades, mala gestión, negocios turbios, favores y demás, que se ha destapado tras la desgraciada muerte de cinco chicas en el Madrid Arena.

Es la segunda «baja» que se produce desde la desgraciada noche en que la avaricia de unos y la desidia de otros, pusieron en peligro la vida de miles de nuestros hijos y acabaron con la de cinco de ellas. El primero en dimitir fue Pedro Calvo, responsable de Seguridad en el consistorio y por tanto uno de los máximos responsables de lo ocurrido, al resultar imputado.

No quiero entrar en el caso Madrid Arena porque ya lo hice en su día y porque cuanto más sabemos del asunto, más se confirma que estamos en manos de gentes sin alma, codiciosos, avarientos, interesados, irresponsables, prevaricadores, golfos en general y parece que la Justicia está dispuesta a llegar al fondo del asunto, de lo que me congratulo.

Hoy lo que quiero poner de manifiesto es lo extraño que resulta que dimita el Vice alcalde, el segundo de a bordo, la mano derecha, de la Alcaldesa Ana Botella pero no lo haga ella misma. Esto puede significar sólo dos cosas:

• Ana Botella, como Alcaldesa, como máxima responsable del Ayuntamiento de Madrid tenía los mismo conocimientos que su Vice alcalde sobre el Madrid Arena y por tanto, por los mismos motivos que ha cesado a su segundo, debería dimitir ella misma, pero no lo hace porque piensa que ofreciéndonos la cabeza de Villanueva, los ciudadanos que somos medios bobos, nos vamos a contentar.
• Ana Botella, en realidad no es la Alcaldesa de Madrid, está puesta ahí para tener entretenida a la mujer del ex Presidente Aznar y poder acudir a la peluquería por las mañanas con dos coches oficiales, chóferes y escolta, a cargo de todos los madrileños, pero no pinta nada, no se entera de nada, no conoce lo que está pasando en este burdel que es el consistorio madrileño.

No se cual de las dos opciones me inquieta más, pero ambas se sustentan con mis impuestos, con los tuyos, con las multas que nos ponen en la famosa zona SER, con la subida de los vados que luego resultó inconstitucional, con el incremento del IBI en unos tantos por ciento propios de usureros y ladrones, con el invento de una nueva tasa de basura, con el cierre de bibliotecas y centros culturales en la capital, con el cierre de colegios públicos, con la reducción de becas de comedor, de transporte, libros…, con el abandono de los dependientes, de los ancianos, de los sin techo en la capital sin alma del reino de España.

Resumiendo, tanto si es por acción, como si es por omisión, la señora del señor del trío de las Azores, aquel de España va bien que llevó la burbuja inmobiliaria hasta su zenit, de la mano del ínclito Montoro, el del círculo virtuoso del ladrillo, el que hace más abdominales que Cristiano Ronaldo, tiene que dimitir. Llegó a alcaldesa sin el concurso del voto ciudadano cuando Alberto Ruiz Gallardón alcanzó su destino en lo universal tocando por fin pelo en el Gobierno de Mariano Rajoy y debe irse del mismo modo innoble, dimitiendo.

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